sábado, abril 28, 2012

Este blog ha estado inactivo desde la campaña presidencial de 2008 en Estados Unidos. Supongo que ahora que estamos en plena campaña presidencial de 2012, es hora de revivirlo. Mitt Romney es el seguro nominado del GOP. El presidente Barack Obama va a su vez por su reelección. Las apuestas y los pronósticos están abiertos. Rayuela apoya sin vacilación al presidente Obama. No porque su gestión haya sido plenamente satisfactoria. El presidente Obama ha fallado en varios aspectos de su programa liberal. Perdió mucho tiempo tratando de ser conciliador con los republicanos. Hizo demasiadas concesiones por ejemplo en el tema de la salud.  Tardó mucho en aprender que los republicanos son el partido de la mala fe, las trampas, los trucos, las zancadillas. Se pasó de ingenuo. En inmigración, Obama se convirtió en el campeón de las redadas y las deportaciones. Mantuvo el bloqueo a Cuba. Ni siquiera fue capaz de cerrar el campo de concentración de Guantánamo. Aunque ciertamente canceló la guerra de Irak, sin estabilizar el país, intensificó la guerra de Afganistán. Sólo tardiamente ha anunciado una reforma tributaria que gravaría más justicieramente a los más ricos. Tardíamente también ha abordado el tema de los préstamos estudiantiles.
Pero aun con estas deficiencias, Obama es ciento por ciento preferible a cualquier republicano. Es un gobernante ecuánime y comprensivo. Ha hecho lo posible por activar la economía. Salvó la industria automobiliaria. Trató de reformar el sistema de salud, con un éxito parcial. La reforma está ahora en manos de la recalcitrante mayoría conservadora de la corte suprema de justicia, un grupo sectario, reaccionario, y activista en favor de causas derechistas. Hay que salirles al paso en las urnas en noviembre.
Hay que apoyar a Obama.