Aunque había serios temores respecto al desempeño del equipo español
luego de ser apabullado por Holanda en su primer juego en esta Copa del Mundo,
sorprendió un poco la forma en que se entregó casi sin resistir ante un equipo
chileno que supo aprovechar la vulnerabilidad del campeón y lo eliminó con un
contundente 2 a 0. Chile, sin duda, fue con mucho el mejor en el campo, y
mereció la victoria. Los españoles lucieron apagados, desmotivados, sin ánimo
de lucha, faltos de creatividad, inspiración, recursos, contundencia,
personalidad. En fin, un desastre, cuyos efectos se reflejaron en las rostros escuálidos
de los jugadores, y el gesto adusto del Marqués Vicente del Bosque, el
entrenador del conjunto ibérico. No fue este un buen recibimiento futbolístico adecuado para el nuevo rey español don Felipe
VI, quien accedió oficialmente al trono, cedido a su favor por su padre el rey
Juan Carlos I.
Por su parte la selección australiana ofreció una tenaz resistencia a la
flamante Holanda, a la que logró poner en aprietos. El equipo de Países Bajos
sin embargo reaccionó y se llevó el triunfo por un marcador de 3 a 2. Ambos
conjuntos brindaron un excelente partido.
En el tercer enfrentamiento del día, Camerún sufrió una merecida paliza
por parte de una eficiente Croacia. Los africanos jugaron tan suciamente, que
incluso se agredieron entre ellos. El marcador final fue 4 a 0.
El plato fuerte de mañana es sin duda el juego de Colombia, que
enfrentará a una peligrosa Costa de Marfil, que ya supo dar buena cuenta de los
japoneses por 2 a 1, el pasado 15 de junio en la Arena Pernambuco, de Recife.
Será un gran reto para los pupilos del maestro Pékerman, en la capital
brasilera. ¡Buena suerte, compatriotas!