Orígenes y retos de una crisis
¿Vamos para una tercera guerra de Iraq? Un grupo radical ISIS (Islamic State for Iraq and Siria) , identificado
en español como Estado Islámicoi para Irak y el Levante (EIIL), que lucha por
establecer estados islámicos en Iraq y Siria, de la secta Suni, ha lanzado una
ofensiva que amenaza por dominar la mayor parte del territorio iraquí, y está
incluso cerca de la capital. Se han tomado ya áreas considerables de las
regiones occidental y norte del país. Las batallas entre ISIS y tropas
gubernamentales iraquíes han llegado hasta 60 kilómetros de Bagdad, la capital
iraquí.
La crisis no ha surgido de la noche a la mañana. ISIS sin duda deriva de
alguna forma de Al Qaeda, el grupo terrorista fundado por el fallecido extremista islámico de origen saudi Osama bin Laden; y
está relacionado asi sea remotamente con otros grupos extremistas, como los que
actúan en Kenia, Nigeria, Yemen, y con los talibanes de Afganistán. De acuerdo
con el corresponsal Peter Berger, de CNN, el grupo ISIS es descendiente directo
de Al Quaeda, la agrupación extremista fundada por Osama bin Laden, que fue
introducido en Iraq gracias a la guerra de George W. Bush (1). La periodista
Angeles Espinosa, de El País, de España, señala que según varios analistas, la
raíz de la actual crisis se ubica en la decisión de Paul Bremer, primer
gobernador de Estados Unidos en Irak después de la ocupación del país en 2003,
de disolver el ejército y la policía del abatido régimen de Hussein (2). Pero
Espinosa y otros observadores indican que buena parte de la responsabilidad de
la crisis es del primer ministro Nuri Al Maliki, por su sectarismo chií, por
discriminar a la comunidad suní y a otros grupos, y por concentrar toda o casi
todo el poder en si mismo.
Según varias fuentes noticiosas, durante los avances de los militantes
de Isis, las tropas del gobierno no han ofrecido resistencia, o han abandonado
las zonas de combate. Maliki ha destituido a varios jefes militares por ese
motivo. Los militantes han dado muestra de una crueldad sin medida, de estar
dispuestos a no detenerse ante nada.Han alardeado incluso de cometer masacres
de cientos de soldados del gobierno. Los sectores chiis y kurdos se oponen a
los militantes de Isis y han ofrecido al gobierno ayudar a combatirlos.
La crisis plantea una situación muy difícil para el presidente Obama. El
avance de Isis obligaría a algún tipo de acción militar, incluso para defender
la embajada de EU en Bagdad, y otros cuerpos diplomáticos. Por el momento Obama
ha descartado enviar tropas regulares, pero asegura estar contempando otras
opciones, como bombardeos de posiciones militantes. Contra esa posibilidad ya
han empezado las protestas de varios grupos.
Los neoconservadores, conscientes de que la causa principal de la
inestabilidad permanente en Iraq es la guerra iniciada por el gobierno de
George W. Bush, se han apresurado a acusar a Obama de haber facilitado la
actual crisis por haber retirado las tropas americanas, de acuerdo a lo prometido
en su primera campaña presidencial.
Una consecuencia curiosa es que los gobiernos de EU y de Irán han tenido
acercamientos con miras a cooperar en el enfrentamiento del problema.
(1) “Bush toxic legacy in Iraq.” Peter Berger. CNN.com. June
16, 2014.
(2) Crisis en Irak. Angeles Espinosa. Elpais.com/edigitales/entrevistas.
Junio 18, 2014.
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